Hubo un tiempo en que decir “te llamo por Skype” era sinónimo de videollamada. Antes de que Zoom, Teams o WhatsApp dominaran nuestras pantallas, Skype era el rey indiscutible de las comunicaciones online. Hoy, tras más de dos décadas de servicio, nos despedimos oficialmente de esta icónica plataforma.
Indice de contenidos
📜 Un poco de historia
Skype nació en 2003 de la mano de desarrolladores estonios y rápidamente revolucionó la forma en que nos comunicábamos a través de internet. Ofrecía llamadas de voz y video gratuitas entre usuarios, algo que entonces parecía casi mágico.
En 2005 fue adquirida por eBay y más tarde, en 2011, por Microsoft por 8.500 millones de dólares. A partir de ahí, se integró en Windows y se convirtió en la aplicación predeterminada para comunicaciones empresariales y personales.
⚠️ ¿Qué pasó?
A pesar de su ventaja inicial, Skype no supo adaptarse a los cambios del mercado. Problemas de rendimiento, una interfaz poco intuitiva y la competencia feroz de apps más ágiles y modernas como Zoom, Google Meet, WhatsApp o Microsoft Teams —la propia alternativa impulsada por Microsoft— aceleraron su declive.
En 2021, Microsoft anunció que Teams reemplazaría a Skype for Business. Y aunque Skype siguió activo para el público general, su uso cayó en picado.
🧭 El final del camino
En 2024, Microsoft comunicó que dejaría de invertir en Skype y que progresivamente dejaría de estar disponible en algunas plataformas. A partir de 2025, su soporte y actualizaciones cesarán por completo.
🙏 Gracias por tanto
Skype fue una herramienta pionera. Nos conectó con familiares en el extranjero, permitió reuniones laborales remotas cuando eso aún era raro, y fue testigo de innumerables momentos importantes. No fue perfecta, pero marcó historia.
Desde aquí, le decimos adiós con gratitud.